Pintxos en el Casco Viejo de Bilbao

Los viernes por la noche, los estudiantes de español de Instituto Hemingway salimos al Casco Viejo de Bilbao– la parte antigua de la ciudad - para probar pintxos, la forma local de tapas. Normalmente cada pintxo está compuesto de un trozo de pan con un poquito de un manjar local, pescado, carne o verdura, encima. Los pintxos están dispuestos a lo largo del bar en platos grandes y los clientes suelen servirse con platos pequeños o directamente con la mano y pagar por el número que han escogido. El Casco Viejo esta lleno de bares que ofrecen pintxos y tapas; y en los más populares, a menudo resulta difícil acercarse al bar debido al número de gente.

Empezamos la noche en el Café Bar Bilbao, ubicado en la efervescente y atestada Plaza Nueva. Esta noche, la plaza está más llena que lo normal debido a un competición de ajedrez que está temiendo lugar en su centro. Los pintxos del Café Bar Bilbao están perfectamente hechos y son tan agradables de ver que es una lástima comérselos. No hay etiquetas para decirnos exactamente qué son, así que llenamos un plato con los que parecen más apetitosos y los llevamos afuera porque hace mucho calor. Esta noche somos una variopinta mezcla de gente con estudiantes de Estados Unidos, Alemania, Inglaterra, Polonia e India. Todos probamos los pintxos más populares aunque los de pescado merecen división de opiniones.

De la Plaza Nueva, andamos al ´Bar Irrintzi´ en la calle de Santa María. Es un bar muy pequeño que algunos de los estudiantes han descubierto unas semanas antes y ahora se ha hecho un lugar preferido para nosotros. Los pintxos aquí son más sofisticados y originales y al mismo tiempo son maravillosos de mirar. Los que han visitado el Bar Irrintzi antes, aconsejan al resto probar un brocheta muy pequeña de cerdo y piña, servido en un vaso con mostaza francesa. Otro pinxo popular es un trozo de pan con pato, manará frito y una salsa de cacahuete. Este bar se ha hecho muy famoso entre nosotros porque hay una gran variedad de pintxos de pescado, carne y verdura, mientras que en los bares más tradicionales, la mayoría de pintxos son de pescado. Con los pintxos, bebemos vino tinto que es barato, pero tiene un buen sabor. Las calles y los bares se hacen más y más llenas de gente de pie, sentados, comiendo, bebiendo y charlando, relajándose después de una semana de trabajo y comenzando su fin de semana.
Madeleine Tailor